Paso peatonal de Olabe

Los vecinos de Olabe salieron a la N-121-A con música y señales de tráfico de cartón para demandar un paso peatonal. La lluvia no pudo parar a los vecinos de Olabe, que ayer a las 20.00 horas salieron a la N-121-A con música, carteles, señales de tráfico de cartón y hasta una carreta para reivindicar su derecho a la seguridad al cruzar la carretera.

Al grito de "El pueblo de Olabe quiere cruzar, el pueblo de Olabe quiere regar", que Javier Boría profesaba desde un megáfono, los vecinos pidieron un paso peatonal para cruzar al otro lado de la vía, donde se encuentra el hotel Ibaiondo, el frontón y la piscina (privados), las huertas y el río Ultzama.

Durante una hora, los vecinos marcharon hasta la gasolinera, donde acaba el término de Olabe, y volvieron a la entrada de la población, donde se quedaron en el margen de la carretera para que los vehículos que pasaban vieran el motivo de la protesta y las retenciones.

Según explicó el presidente del concejo de Olabe, Mikel Uriarte, los agentes de la Guardia Civil habían cortado el tráfico, y mientras se produjo la manifestación apenas pasaron vehículos. "Otras veces llevábamos una cola de coches detrás y hoy no", comentaban los vecinos. Y es que no es la primera vez que Olabe sale a la carretera para manifestarse y pedir una regulación en la travesía. Desde mayo llevan organizando iniciativas y protestas, con las que pretenden continuar durante los domingos del mes de agosto. "Si no hay respuesta política en septiembre nos volveremos a movilizar", afirmó Uriarte, presidente del concejo. "Lo que queremos es que nos den tranquilidad", añadió.

Uriarte explicó que han tenido ya varias reuniones con los responsables del departamento de Fomento del Gobierno de Navarra, pero que todas se han saldado sin éxito. El presidente del concejo adelantó que tienen planeada la próxima reunión para septiembre, y afirmó mostrarse optimista con respecto al resultado. "Se ve una buena disposición. De ahí a lo que pase después hay un trecho, pero mientras nos vayan dando largas seguiremos con ello", afirmó. "Lo que queremos con estas movilizaciones es también forzar el adelanto de la reunión", añadió.

La población, que tiene 35 habitantes, de los que diez son niños, lleva desde 2008 demandando sin éxito un paso peatonal para cruzar con tranquilidad esta travesía de la N-121-A, por la que, según datos del concejo, circulan una media de 900 vehículos por hora, 12.000 al día, de los cuales 2.500 son camiones.

Los vecinos de la población solicitan un paso peatonal como el que hay en las 26 travesías de carreteras nacionales que hay en Navarra, con un paso de cebra, un semáforo, iluminación, bandas transversales y señalización de travesía y balizamiento, para que los vehículos circulen a 50 km/h.